Convulsiones

domingo, 14 de octubre de 2007

Es un cambio súbito en el comportamiento provocado por una exesiva actividad eléctrica en el cerebro.
Consideraciones generales
Dependiendo de la parte del cerebro afectada, existe una gran variedad de síntomas posibles en un ataque o convulsión. Muchos tipos de ataques ocasionan desmayos con movimientos espasmódicos o temblor del cuerpo. Sin embargo, algunos ataques consisten en episodios de mirada fija que pueden pasar inadvertidos con facilidad. Ocasionalmente, pueden causar sensaciones anormales temporales o molestias visuales.
Por lo general, los ataques o convulsiones se pueden clasificar en "simples" (no cambia el nivel de conciencia) o "complejos" (cambia el nivel de conciencia). También se pueden clasificar como generalizados (afecta todo el cuerpo) o focales (afecta solo una parte o un lado del cuerpo).
La epilepsia es una enfermedad crónica con colvusiones recurrentes. Algunos tipos de epilepsia son hereditarios.
Ver también:
Epilepsia
Crisis de pequeño mal
Convulsión tónico-clónica generalizada (convulsión de gran mal)
Convulsión parcial (focal)
Convulsión del lóbulo temporal
Convulsión febril (convulsiones en niños con altas temperaturas)
Causas comunes
Cualquier condición que resulte en una excitación eléctrica anormal del cerebro, puede desencadenar un ataque o convulsión, incluyendo:
Epilepsia
Lesión o trauma en la cabeza
Infección (absesos cerebrales, meningitis)
Tumor cerebral
Accidente cerebrovascular
También, cualquier condición médica que irrite las células cerebrales. Las condiciones médicas que comúnmente provocan ataques incluyen:
Hipoglucemia (bajo nivel de azúcar en sangre)
Consumo de drogas (especialmente cocaína o estimulantes)
fiebre alta (convulciones febriles en niños)
Abstinencia de alcohol
Cuidados en el hogar
Las personas con epilepsia diagnosticada deberían usar siempre una etiqueta de advertencia médica.
La mayoría de las convulsiones son auto-limitadas y se detienen a sí mismas después de varios períodos de tiempo. Sin embargo, la víctima puede lastimarse; aspirar algún alimento, líquido o vómito; o no recibir suficiente oxígeno. Durante una convulsión es importante proteger a la víctima para que no se lastime. Se voltea la cabeza de la víctima por si se presenta vómito.Ver primeros auxilios en caso de ataques.
Después de una convulsión, la mayoría de las víctimas cae en un sueño profundo. No se debe evitar que se duerman. Es posible que al despertar continúen desorientadas por cierto tiempo.
Se debe permanecer con la víctima hasta que se recupere o hasta que llegue ayuda médica profesional. Mientras tanto, es importante evaluar el pulso, ritmo respiratorio, presión sanguínea.
NO SE DEBE refrenar a la víctima
NO SE DEBE colocar nada entre los dientes de la víctima durante un ataque (como los dedos)
NO SE DEBE mover a la víctima, a menos que esté en peligro o cerca de algo peligroso
NO SE DEBE tratar de detener las convulsiones de la víctima; la persona no puede controlarse durante un ataque y no se da cuenta de lo que está pasando.
NO SE DEBE administrar nada por vía oral a la víctima hasta que hayan cesado las convulsiones y ésta se encuentre totalmente consciente y alerta
Algunos pacientes que padecen de epilepsia, se les puede implantar un estimulante del nervio vago en el pecho, a las cuales se les puede detener las convulsiones activando este dispositivo. Otros pacientes se les puede administrar medicamento vía rectal durante la convulsión. No se debe administrar nada por la boca, ni siquiera medicamentos.
Se debe llamar al médico si
Se debe informar al médico sobre cualquier tipo de convulsión (incluso si es leve). Las personas afectadas por epilepsia o convulsiones recurrentes deben visitar al médico para que ajuste el medicamento o dé otras instrucciones.
Si es la primera vez que presenta una convulsión o si se presenta un nuevo tipo de convulsión, se debe llevar al paciente al médico de inmediato, ya que estos síntomas pueden ser indicativos de una condición mortal, como accidente cerebrovascular o meningitis.

Prevención
No existe una manera específica de prevenir los ataques. De ser necesario, se recomienda utilizar un casco para prevenir una lesión, lo que disminuirá las posibilidades de una lesión al cerebro y de ataques subsecuentes. Se deben evitar las drogas recreativas. Las personas con epilepsia deben tomar la medicación como indicó el médico y evitar tomar cantidades excesivas de alcohol.
Lo que se puede esperar en el consultorio médico
El médico hace un examen físico y realiza preguntas que lo ayudan a saber la causa del ataque. A continuación, algunas de las preguntas:
¿Ocurrió o comenzó en un lado del cuerpo?
¿Presentó movimiento muscular y si fue así, cuál fue el patrón?
¿Existen factores de riesgo (como una reciente lesión en la cabeza)?
¿Se mantuvo conciente durante el ataque?
¿Cuánto tiempo duró el ataque?
¿Cuál es la frecuencia con que se presentan los ataques?
¿Existe alguna señal de advertencia (aura) del ataque?
¿Presentó algún otro síntoma (cambios visuales, olores anormales)?
Se pueden realizar los siguientes exámenes de diagnóstico:
TC de la cabeza o IRM de la cabeza
EEG
Punción lumbar
Pruebas sanguíneas
Con frecuencia se prescriben medicamentos los cuales deben tomarse siguiendo con gran precisión las instrucciones del médico. Los miembros de la familia deben observar y llevar un diario de todos los ataques para así obtener el tratamiento adecuado.
Las personas con convulsiones no controladas no deben conducir. Cada país tiene una ley distinta que determina a cuáles pacientes se les permite conducir. Las personas que sufren de convulsiones tampoco deben nadar ni montar en bicicleta sin compañía.
Referencias
Goetz, CG. Textbook of Clinical Neurology. 2nd ed. St. Louis, MO: WB Saunders; 2003: 1158-1160.
Marx J. Rosen’s Emergency Medicine: Concepts and Clinical Practice. 5th ed. St. Louis, Mo: Mosby; 2002:145-149, 1445.
Hirtz D, Ashwal S, Berg A, et al. Practice parameter: Evaluating a first nonfebrile seizure in children: Report of the Quality Standards Subcommittee of the American Academy of Neurology, the Child Neurology Society, and the American Epilepsy Society. Neurology. 2000;55;616-623.

Datos personales